jueves, septiembre 20, 2007

Vuelvo a casa,

El horizonte cae en un embalse de oleo perla; gris, un remanso, un estanque invertido. Voces de mis amigos, y de otros que no conoceré nunca y me hablan desde remotas cimas.

Vallas que no separan y la sombra curiosa de los hechos del hombre. Me acuerdo de todos. Pienso en una hora que no conocí. Quién puede decir de todo aquello que nos faltó por vivir. Es un infinito de burbujas, de posibilidades irisadas a través de las que hemos caminado; no tiene la menor importancia: el resultado, estamos unidos, unos a otros, entre resonancias más o menos intensas.

Buscaremos por siempre la belleza a pesar de nuestros errores. Buscaremos por siempre el refugio de una tarde en la que se compone una canción.

Tu ánimo ha de ser el del ángel viril y delicado. La fuerza y la responsabilidad, la sensibilidad, la poesía. El Padre de Todo era dios de la Guerra y las Palabras Rimadas. Las delicias del amor y la búsqueda de la perfección y la belleza; el cultivo del ideal.

Cultiva tu ideal sin sentir vergüenza en un mundo de risas huecas y confusiones planeadas. Te veré allá donde nos dirigimos.

jueves, septiembre 13, 2007

Bella Tormenta

Es una tormenta que he deseado durante mucho tiempo.

Ducha vikinga sin agua caliente, tardes con las primeras lluvias de otoño y esa luz de Septiembre (preguntadle a Steele), recuerdos de La Comarca, Led Zeppelin que vuelven, el Bardo se pira a Gondor (beware of Orcs) y los Cuentos de Pithulhu... Orc Nest, quizá Machine Head en Londres, senderismo, colchones hundidos, IKEA, el refresco de mora, los precios de Eroski. Todo. Poco a poco se configura. Todo. Es tan bueno.

Hay ASL pero no tengo ADSL. Leo por encima el World In Flames, Tobruk. Diplomacia, algún día. Starcraft en red cuando encuentre un centro Mail. El bajo acústico que algún día tendré que devolver, la guitarra de Thomann y el cabreo en Correos, el 15 de Septiembre que llegó demasiado deprisa y el disco duro hundido de Inphobis. La mouth harp y el whistle en C venido de Almería.

Empiezo a entender la Lengua Antigua y el sentido de los fines de semana. He renunciado a las noticias, porque son todo culos de vaso sucios donde debería haber lluvia y mares, igual que he renunciado a la televisión desde hace años, y compruebo que no tenemos memoria de más de un mes. Prefiero otras noticias que sí son importantes, esas que me cuentas cada día, cada noche. Nuestra Historia sobre la que no tenemos dudas o tenemos, maravilla, las del resto de los mortales, benditos sean todos. El sol se pone como en los cuadros de la sala 8 ¿o era la 14? y no me lo creo, señales de salida y antenas Yagi de camino hacia la estación. Tengo que quedar ya porque os echo de menos, tengo que quedar aunque quiera esperar a organizarme ¿qué es eso?

Y tantas cosas sobre las que tendría que estar escribiendo...

Y volver a casa ahora tiene más sentido todavía.

Buena tormenta, bella tormenta, ella me hace tan feliz como nunca soñé.
Nos vemos un día de estos.

lunes, septiembre 03, 2007

Un Bosque según Tácito

Ceterum nec cohibere parietibus deos neque in ullam humani oris speciem adsimulare ex magnitudine caelestium arbitrantur: lucos ac nemora consecrant deorumque nominibus appellant secretum illud, quod sola reverentia vident.

Para el resto [de sus deidades], dada la grandeza y la majestad de los seres celestiales, ellos juzgan totalmente inapropiado mantener a los Dioses encerrados dentro de muros, o representarlos en la imagen de humanos. Consagran bosques y arboledas completos y llaman a estos lugares ocultos con los nombres de los Dioses, divinidades éstas a las que sólo profesan adoración en forma de contemplación.

Tácito, Germania (De Origine et situ Germanorum), IX.